Tipos de custodia en Estados Unidos [Guía COMPLETA]

Cuando se trata de la custodia completa para madres en Estados Unidos, hay varios tipos de arreglos que pueden ser establecidos entre los padres.

Cada tipo de custodia tiene sus propias características y efectos legales. En esta guía completa, exploraremos los diferentes tipos de custodia en Estados Unidos y lo que debes saber sobre cada uno de ellos.

¿Qué implica la custodia de los menores en Estados Unidos?

La custodia de los menores es un tema complejo en Estados Unidos, ya que cada estado tiene sus propias reglas y criterios de evaluación. Sin embargo, todas las cortes de menores siguen un proceso común para evaluar las condiciones y capacidades de los padres y dictaminar la mejor custodia posible para los menores involucrados.

El proceso de evaluación comienza por analizar las condiciones de los padres, tanto individualmente como en su capacidad para proveer una crianza y manutención adecuada para sus hijos.

Entre las condiciones y factores que se evalúan regularmente se encuentran los ingresos económicos de los padres, sus antecedentes penales, sus historiales laborales, las condiciones de su hogar, su estabilidad emocional y su reputación en la comunidad.

Adicionalmente, algunas cortes también pueden evaluar los deseos de los menores involucrados en la disputa de custodia, en la medida de su edad y madurez para expresar su opinión. Todos estos factores son considerados para determinar la mejor custodia posible para los menores.

Una vez evaluados estos aspectos, la corte dictamina sobre la custodia de los menores, tomando en cuenta el bienestar físico y emocional de los mismos. En general, la custodia se puede otorgar en diferentes modalidades, desde una custodia compartida hasta una custodia exclusiva de uno de los padres, dependiendo de los resultados de la evaluación.

  • La custodia de los menores varía según el estado en el que se trate: es importante tener en cuenta que cada estado tiene sus propias reglas y criterios de evaluación en cuanto a la custodia de los menores.
  • Las cortes de menores evalúan las condiciones y capacidades de los padres: los ingresos económicos, antecedentes penales, historiales laborales, estabilidad emocional y reputación en la comunidad son algunos de los factores que se toman en cuenta para evaluar a los padres en la disputa de custodia.
  • Los deseos de los menores también pueden ser considerados en la evaluación: en la medida de su edad y madurez para expresar su opinión, algunas cortes también pueden evaluar los deseos de los menores involucrados.
  • La corte dictamina la custodia tomando en cuenta el bienestar físico y emocional de los menores: al final del proceso de evaluación, la corte decide sobre la custodia tomando en cuenta el bienestar físico y emocional de los menores involucrados en la disputa.

Evaluación de la estabilidad económica y mental de los padres en la patria potestad

Cuando se trata de definir la patria potestad de los hijos, los tribunales tienen la gran responsabilidad de evaluar cuidadosamente la condición económica y mental de cada uno de los padres. Este proceso es fundamental para tomar decisiones adecuadas que garanticen el bienestar de los niños.

Entre los factores que se tienen en cuenta en esta evaluación, se encuentran los ingresos de cada progenitor, si tienen vivienda fija o no, los beneficios que puedan ofrecer sus trabajos a sus hijos y mucho más. Es importante considerar también la capacidad que tienen los padres de costear la educación, transporte, seguridad médica y hasta las actividades extracurriculares de los niños.

Además de evaluar la situación económica, los tribunales también deben considerar la salud mental de los padres. Es esencial asegurarse de que ambos estén aptos para tomar decisiones beneficiosas para sus hijos. En caso de que uno de los padres presente algún problema de salud mental, es posible que el tribunal lo remita a una consulta con un profesional de la salud mental.

Es importante destacar que el bienestar de los hijos es la prioridad número uno en estos casos y se toman todas las medidas necesarias para garantizar su seguridad y felicidad.

La estabilidad económica y mental de los padres son factores críticos al momento de decidir la patria potestad de los hijos. Los tribunales están comprometidos con garantizar el bienestar de los niños y se toman estas evaluaciones muy en serio.

En la evaluación de la patria potestad de los hijos, las autoridades judiciales son conscientes de que se trata de una decisión que afectará la vida de los niños afectuosamente. Por esta razón, los tribunales deben analizar cuidadosamente la estabilidad económica de los padres y su capacidad para proporcionar una vida digna a los pequeños.

La situación financiera es una de las principales preocupaciones de los tribunales, ya que esto puede determinar el futuro de los niños. Además, también se consideran otros aspectos como la estabilidad laboral, la vivienda, la educación y la atención médica que puedan proporcionar los padres.

Otro factor clave en la evaluación de la patria potestad es la salud mental de los padres. No se trata de un elemento menor, ya que la capacidad de los progenitores para tomar decisiones conscientes y responsables también impactará en el bienestar de los hijos.

En definitiva, la evaluación de la estabilidad económica y mental de los padres se convierte en una herramienta vital para los tribunales que, comprometidos con el bienestar de los niños, garantizan que las decisiones que se tomen sean las más adecuadas.

La prioridad número uno es asegurar que los hijos estén siempre seguros y felices.

La importancia de la relación con los padres en la toma de decisiones judiciales sobre la custodia de los hijos

En caso de un divorcio, la determinación de la custodia de los hijos es una decisión que puede tener un efecto duradero en la vida de los niños. Para tomar una decisión informada, los tribunales deben considerar diversos factores, y uno de los más críticos es la naturaleza de la relación que los niños mantienen con sus padres.

En el pasado, los jueces a menudo favorecían a las madres al tomar una decisión sobre la custodia de los hijos, pero hoy en día, la evaluación es más rigurosa y la calidad de la relación de los niños con sus padres es primordial. Si los padres tienen una relación distante o sin conexión emocional, es probable que esta situación no cambie después de la separación. Por lo tanto, los tribunales deben ser conscientes de este hecho y tomarlo en cuenta al tomar una decisión sobre la custodia de los niños.

En casos donde haya más de un niño involucrado, es importante evaluar la relación individual que cada uno tiene con sus padres. Aunque se trata de una decisión delicada, mantener a los hermanos juntos es lo más común.

Los padres deben ser conscientes de la importancia de mantener una relación sana y significativa con sus hijos tanto antes, durante como después del matrimonio. Si bien el fin del matrimonio puede ser un momento difícil, es importante recordar que la determinación de la custodia de los hijos es una decisión que tiene el potencial de afectar profundamente la vida de los hijos en el futuro.

En resumen, la relación que los niños mantienen con sus padres es un factor crítico a considerar en la toma de decisiones judiciales sobre la custodia. Por ello, es esencial que los padres trabajen arduamente para mantener una conexión significativa con sus hijos a lo largo del tiempo.

La importancia de los deseos del niño y de los padres en la custodia de los hijos

La custodia de los hijos es una de las decisiones más importantes que se pueden tomar en una situación de divorcio o separación de pareja. En este proceso, los deseos y opiniones del niño y de los padres son fundamentales para alcanzar un acuerdo justo y beneficioso para todos.

En muchos estados de USA, los deseos del niño pueden ser tomados en cuenta en la toma de decisiones de la custodia. Sin embargo, esto se hace siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones, siendo la edad y capacidad mental del niño las más importantes. Es fundamental que se determine si el niño está lo suficientemente maduro para expresar sus deseos y si estos deseos son adecuados según su edad y capacidad mental.

Por otro lado, los padres también tienen voz en este proceso. Se pueden realizar entrevistas con los funcionarios encargados del caso para expresar sus opiniones, deseos e intereses respecto a la crianza de sus hijos. Este proceso asegura que todas las partes involucradas en la custodia sean escuchadas y se llegue a un acuerdo justo y adecuado.

Es importante recordar que tanto los deseos del niño como los de los padres son fundamentales en la toma de decisiones de la custodia de los hijos. Las voces de todas las partes involucradas deben ser escuchadas para llegar a un acuerdo justo y beneficioso para todos.

Tutela de hijos para padres no casados

Si eres padre o madre y no estás casado, es posible que desees establecer un acuerdo legal sobre la tutela de tus hijos. Afortunadamente, según las leyes estadounidenses, la tutela se puede establecer sin la necesidad de estar casados, lo que brinda una gran tranquilidad.

En comparación con los casos de divorcio, el proceso de evaluación y asignación de la patria potestad en estos casos suele ser más sencillo. Sin embargo, hay algunos aspectos importantes que se evaluarán, como la estabilidad, los deseos y la relación entre las partes involucradas.

Lo más común durante la asignación de la tutela es que los padres lleguen a un acuerdo y presenten una petición ante la corte. En este acuerdo se deben establecer los derechos de cada padre y las responsabilidades que les corresponden, así como la custodia y visitas del menor.

Es importante tener en cuenta que el juez revisará el acuerdo y lo aprobará siempre y cuando considere que está en el mejor interés del menor. En caso contrario, se puede realizar una mediación para llegar a un acuerdo justo y equitativo para todas las partes.

La tutela puede ser modificada en cualquier momento, siempre y cuando se presente una petición ante la corte y se demuestre que ha habido un cambio significativo en la situación de los padres o del menor.

En resumen, no es necesario estar casados para establecer la tutela de los hijos y existen procedimientos legales claros para hacerlo. Lo importante es llegar a un acuerdo justo y equitativo para todas las partes involucradas y siempre actuar en el mejor interés del menor.

Reconocimiento de paternidad: un proceso legal que asegura los derechos del niño y del padre biológico

El reconocimiento de paternidad es un proceso legal que se requiere cuando no se tiene certeza sobre la identidad del padre de un niño. Aunque en la mayoría de los casos, el esposo es considerado automáticamente como el padre, en otros casos puede ser necesario realizar una declaración jurada para establecer legalmente la paternidad.

En algunos estados de USA, la declaración jurada puede ser necesaria aunque el niño haya sido presentado en el momento del nacimiento. Además, en algunos casos, esta declaración debe ser validada por un notario para asegurar su validez legal.

Es importante tener en cuenta que el reconocimiento de paternidad es un proceso serio que puede tener implicaciones importantes en la vida del niño y de los padres. Establecer la paternidad puede permitir al padre biológico tener derecho a visitas, solicitar la custodia y ser responsable del pago de manutención. También es importante para la salud del niño conocer sus antecedentes médicos por parte del padre biológico.

En conclusión, el proceso de reconocimiento de paternidad es un procedimiento importante que puede requerir una declaración jurada y la validación notarial en algunos estados de USA. Es necesario tener en cuenta que este proceso puede tener implicaciones legales, financieras y emocionales en la vida del niño y del padre biológico.

Es crucial que se respeten los derechos del niño y de los padres, por lo que se recomienda buscar asesoramiento legal antes de iniciar el proceso de reconocimiento de paternidad.

Acuerdo de custodia: la importancia de establecer los términos de la crianza del niño.

La crianza de un niño es una responsabilidad compartida por los padres, pero cuando se trata de la separación o divorcio de los padres, pueden surgir problemas que afecten el bienestar del niño. Es por eso que es crucial establecer un acuerdo de custodia que registre los términos de la crianza del niño.

El acuerdo de custodia es un convenio legal que se presenta ante los tribunales y que se utiliza comúnmente cuando los padres no están casados, o cuando están en medio de un proceso de divorcio. Es importante resaltar que este acuerdo debe quedar establecido por escrito y contar con la aprobación de un juez de custodia, quien evaluará si las partes acordaron voluntariamente los términos establecidos.

Dentro del acuerdo de custodia deben quedar establecidos puntos claves como el lugar de vivienda del niño, quién es el encargado de tomar decisiones importantes en su vida, cómo se distribuye el tiempo del niño con cada uno de los padres, los regímenes de visitas con otros familiares, entre otros aspectos. Todo esto con el fin de garantizar la estabilidad emocional del niño y su bienestar general.

Es esencial que los padres entiendan la importancia de cumplir con los términos establecidos en el acuerdo, ya que cualquier cambio en el mismo debe hacerse mediante una nueva solicitud ante el juez encargado del caso. Asimismo, la falta de cumplimiento de los términos acordados puede afectar la dinámica saludable entre los padres, y lo más importante, la estabilidad emocional del niño.

Recuerda que establecer un acuerdo de custodia no es solo una obligación legal, es una responsabilidad como padres. Asegúrate de cumplir con los términos establecidos y de trabajar en conjunto para garantizar el bienestar general del niño.

Tipos de Custodias en Estados Unidos

La custodia es un tema fundamental que se aborda en los casos de separación o divorcio, especialmente si hay hijos menores implicados. Es necesario saber en qué consisten los diferentes tipos de custodia que existen para poder tomar una decisión informada y beneficiosa para la familia.

En general, podemos hablar de tres tipos de custodia: custodia legal, custodia física y custodia compartida. La custodia legal se refiere al derecho que tiene uno de los padres de tomar decisiones importantes sobre la vida del menor, como su educación o su salud. Por otro lado, la custodia física se trata de determinar con quién vivirá el menor. Finalmente, la custodia compartida implica que ambos padres comparten la responsabilidad de cuidar al menor y tomar decisiones relevantes para su vida cotidiana.

Cada tipo de custodia tiene sus propias variables y estas pueden variar según el caso en particular. Por ejemplo, en la custodia legal, el padre o la madre que no tiene la custodia puede tener derecho a visitas regulares al menor. En la custodia física también se puede establecer un régimen de visitas.

En cuanto a la custodia compartida, puede ser equitativa o no equitativa. En el primer caso, el menor pasará el mismo tiempo con cada padre, mientras que en el segundo, el menor pasa más tiempo con uno de los padres.

Es importante destacar que los padres deben conocer bien los tipos de custodia y las variables que implican cada uno de ellos.

Comprender las complejidades de los diferentes tipos de custodia permitirá tomar decisiones que beneficien a los hijos y a la familia en su conjunto.

En resumen, los tipos de custodia son un tema fundamental en los casos de separación o divorcio en los que hay hijos menores involucrados. Los padres deben tener un conocimiento profundo sobre las diferentes opciones que existen para poder tomar una decisión informada que beneficie al menor y a la familia en general.

Custodia Legal: ¿Quién decide por el bienestar de los hijos?

La custodia legal es un tema de gran relevancia en la crianza de un hijo. Esta figura otorga a uno de los padres el derecho de tomar las decisiones más importantes relacionadas con la educación, creencias religiosas y cuidados médicos del menor, garantizando su bienestar y futuro saludable.

Cabe destacar que la custodia legal puede ser establecida de manera acordada entre ambas partes o por medio de un proceso judicial. En este sentido, se determinará quién será el progenitor encargado de la patria potestad y, por ende, de tomar las decisiones pertinentes.

Es importante tener en cuenta que, aunque el otro padre no tenga la custodia legal, sigue teniendo derechos sobre su hijo y puede participar en su vida de diversas maneras.

En definitiva, la custodia legal es una herramienta útil para proteger el bienestar de los hijos en situaciones de separación o divorcio de los padres, evitando conflictos en la crianza y garantizando una toma de decisiones que beneficie al menor.

En resumen: la custodia legal otorga el derecho a uno de los padres de tomar decisiones relevantes para la crianza del hijo, siendo fundamental para garantizar su bienestar y futuro saludable.

Custodia legal compartida: Entendiendo los términos básicos.

La custodia legal compartida es un acuerdo común en procesos de divorcio, especialmente cuando los padres no pueden llegar a un acuerdo por sí mismos y necesitan recurrir a la decisión de un juez.

En términos simples, este tipo de tutela establece que ambos padres tienen derecho y responsabilidad legal para tomar decisiones importantes en la vida del o los niños que tengan en común.

Es importante tener en cuenta que la custodia legal compartida no siempre es una opción viable, ya que en ciertas situaciones, uno de los padres puede no estar en condiciones de tomar decisiones que estén basadas en el bienestar del menor.

En estos casos, el tribunal tomará la decisión que mejor se ajuste a las necesidades del niño, incluso si esto significa otorgar la custodia a uno de los padres.

A pesar de que uno de los padres tenga la custodia física completa, esto no significa que el otro progenitor pierda sus derechos dentro del acuerdo de tutela legal compartida. Ambos padres tienen derecho a participar en la crianza y tomar decisiones importantes en la vida del menor, independientemente de su ubicación geográfica.

Es importante destacar que si la custodia legal compartida es dictada por un tribunal, el padre que tiene la custodia física no puede impedir la intervención del otro progenitor.

Si esto sucede, la parte afectada puede abordar el caso ante un juez y solicitar que se establezcan nuevos términos.

En resumen, la custodia legal compartida permite a ambos padres mantener un vínculo con el menor, incluso en caso de separación o divorcio, y tomar decisiones importantes en conjunto que influyen en la vida del niño. Es fundamental que ambos progenitores estén dispuestos a colaborar y tomar decisiones en conjunto para el bienestar del menor.

Custodia Física: ¿Qué significa y cuáles son sus consideraciones?

La custodia física es el proceso legal que determina cuál de los padres será el responsable de la tutela y el cuidado físico del niño después de un divorcio o separación. Se evalúan muchos factores, incluyendo la salud mental, la estabilidad económica y la conexión emocional con el niño.

Es importante destacar que la residencia donde el niño vivía durante la relación no siempre será el lugar donde continuará viviendo. En cambio, la corte puede tomar decisiones de residencia basadas en lo que sea mejor para el bienestar del niño.

El proceso de determinar la custodia física puede ser emocionalmente agotador y doloroso para ambas partes, por lo que se recomienda buscar tanto asesoramiento legal como emocional. No es inusual que se designe a uno de los padres como el “progenitor custodio” y al otro como el “progenitor no custodio”.

En resumen, la custodia física es una cuestión que debe abordarse con delicadeza y considerar múltiples factores para garantizar el bienestar del niño. Es importante saber que la corte tomará una decisión basada en lo que sea mejor para el niño, en lugar de simplemente seguir reglas establecidas.

Custodia física compartida: una opción beneficiosa para los niños

En los últimos tiempos, la custodia física compartida se ha convertido en una alternativa cada vez más popular en casos de separación o divorcio de padres. Si el niño ha vivido con ambos progenitores durante toda su vida, o pasa mucho tiempo en las casas de ambos, esta dinámica puede resultar la más beneficiosa para el infante.

El tribunal es el encargado de distribuir el tiempo en partes iguales para que el niño pueda vivir con ambos padres. Esta distribución se realiza de manera equitativa, lo que significa que cada progenitor tiene el mismo tiempo de convivencia con el menor.

Es importante destacar que esta dinámica resulta más efectiva cuando los padres viven cerca, ya que resulta más fácil para el niño mantener su rutina y relacionarse con sus amigos y vecinos.

En caso de que los padres vivan lejos, el tribunal deberá realizar una evaluación detallada para establecer la distribución del tiempo adecuada.

Además, la custodia física compartida implica un exhaustivo análisis de los horarios escolares y otras actividades del niño para hacer una distribución apropiada del tiempo. Esto permite al menor continuar su vida cotidiana sin mayores interrupciones y cumplir con sus obligaciones académicas y deportivas sin problemas.

Definitivamente, la custodia física compartida se presenta como una excelente opción para aquellos padres que buscan el bienestar de sus hijos tras una separación o divorcio. El equilibrio en la distribución del tiempo y la cooperación entre los padres son fundamentales para garantizar una convivencia armoniosa y sin conflictos.

Custodia total: ¿en qué situaciones se otorga?

La custodia total de un hijo es una resolución que se toma en situaciones excepcionales. Aunque la norma general es que ambos padres tengan la tutela de los hijos, hay circunstancias en las que eso no es posible.

Cuando se dan casos de abuso infantil, violencia doméstica, adicciones a drogas o alcohol y otros problemas similares, el juez puede considerar la opción de otorgar la custodia física total a uno de los padres.

No obstante, esta decisión solo se tomará después de que los abogados y el juez encargado hayan evaluado suficientes causas determinantes para que uno de los progenitores quede fuera de las decisiones relacionadas a su hijo.

Es importante tener en cuenta que aunque es raro que la custodia legal quede en manos de un solo progenitor, el otro padre aún podría tener derecho a decidir sobre la educación, la religión y la salud del menor.

Sin embargo, la prioridad siempre será el bienestar del niño, y cualquier decisión tomada deberá estar enfocada en proteger su seguridad y su desarrollo emocional.

En resumen, la custodia total es una opción que solo se contempla en situaciones extremas y después de un detallado análisis por parte de expertos en derecho y psicología infantil. Lo más importante es siempre pensar en el bienestar de los niños y asegurarse de que estén protegidos y cuidados en todo momento.

Importante: La custodia total solo se otorga en casos excepcionales como abuso infantil, violencia doméstica y adicciones a drogas o alcohol. La prioridad siempre será el bienestar del niño.

¿Qué ocurre si se pierde la custodia de un hijo?

La pérdida de la custodia de un hijo es un tema delicado en el ámbito legal. A pesar de que parece impensable, puede darse el caso de que uno de los padres pierda tanto la custodia física como la tutela legal del menor, debido a incumplimientos de obligaciones establecidas por las leyes de protección infantil en los Estados Unidos.

La ley busca proteger el bienestar del menor y el derecho de los padres, pero también establece sanciones para aquellos que incumplen sus obligaciones. Por esta razón, los tribunales pueden decidir la pérdida temporal o indefinida de la custodia, dependiendo de los motivos que la hayan causado.

Cabe destacar que la actitud del padre después de perder la tutela del menor es un factor relevante. Los tribunales están abiertos a evaluar mejoras en los comportamientos y actitudes, siempre y cuando el padre demuestre su compromiso y responsabilidad para con el menor.

Entre las causas que podrían justificar la pérdida de la custodia para un padre, se encuentran conductas inapropiadas o negligentes que podrían poner en peligro la integridad física o emocional del menor, así como también la incapacidad de proveer las necesidades básicas para su desarrollo.

En casos extremos, si ninguna de las partes es apta para hacerse cargo del menor, los servicios sociales estadounidenses pueden tomar la responsabilidad de su cuidado y protección.

En conclusión, la custodia de un hijo es un tema delicado que requiere de la observancia de leyes y regulaciones específicas, destinadas a garantizar el pleno respeto y bienestar del menor en cualquier circunstancia.

¿Cuáles son las causas más comunes de la pérdida de la patria potestad?

La patria potestad es un derecho fundamental que tienen los padres sobre sus hijos y que les permite tomar decisiones importantes en su vida.

Sin embargo, existen situaciones en las que este derecho puede ser suspendido o incluso revocado, con el objetivo de proteger el bienestar de los menores. A continuación, te explicamos cuáles son las causas más comunes de la pérdida de la patria potestad.

  • Una de las razones más frecuentes es el abuso físico, emocional o sexual por parte de alguno de los progenitores. En estos casos, los tribunales pueden retirar la patria potestad al padre o madre abusador, con el fin de garantizar la seguridad y el bienestar del menor.
  • Otra causa común es el incumplimiento de las obligaciones parentales, como no proveer suficiente comida, ropa, educación o atención médica a los hijos. En estos casos, los tribunales pueden considerar que el padre o madre no está en condiciones de ejercer la patria potestad de manera adecuada y, por ende, retirarle el derecho.
  • Asimismo, el consumo de drogas, el alcoholismo y otras adicciones pueden ser motivos para perder la patria potestad. Si un padre se encuentra en un estado de intoxicación constante y no puede brindar el cuidado y la atención que su hijo necesita, los tribunales pueden considerar que no está en condiciones de seguir ejerciendo este derecho.
  • Otro motivo que puede llevar a la pérdida de la patria potestad es la condena a prisión de alguno de los progenitores. Si un padre es condenado por algún delito grave y se encuentra privado de su libertad, el juez puede considerar que no está en condiciones de ejercer sus responsabilidades como padre o madre y, por lo tanto, retirarle la patria potestad de manera temporal o definitiva.

En definitiva, la pérdida de la patria potestad es una medida extrema que se toma en situaciones excepcionales, con el objetivo de proteger el bienestar de los menores.

Si bien cada caso es particular y las decisiones se toman de manera individual, estas causas son algunas de las más comunes que pueden llevar a la suspensión o revocación de este derecho fundamental.

Es importante destacar que la patria potestad es un derecho fundamental que tiene como fin proteger y garantizar el bienestar de los hijos, y su suspensión o revocación solo se debe tomar en situaciones excepcionales para proteger a los menores.

Causas más graves de pérdida de custodia en Estados Unidos

Existen situaciones en las que las leyes de protección infantil en Estados Unidos son mucho más rigurosas que las comunes. Cuando se tratan de casos graves como el abandono, la violencia directa, el consumo de drogas frente a los hijos o incluso el abuso sexual, los padres pueden perder la custodia del menor.

En el caso del abuso sexual infantil, la situación es aún más delicada. Si hay pruebas contundentes y avaladas por un médico, además de perder la custodia, el padre puede enfrentar cargos criminales y una pena de prisión considerable.

La protección de los derechos de los menores es un tema crucial en Estados Unidos, por lo que es vital que los padres comprendan las graves consecuencias que pueden enfrentar si cometen alguno de estos actos mencionados anteriormente.